El Archena llegará a los 50 encuentros en División de Honor esta próxima jornada. Será contra el CD Roda, en un partido que necesita ganar para seguir alimentando el sueño de la permanencia. «Mientras haya un 1% de posibilidades habrá un 99% de fe por parte del equipo» reconoce el portero Joselu Correas, uno de los jugadores que ha participado en las dos temporadas de la entidad en la élite del fútbol juvenil.
Joselu es de los pocos jugadores que ha defendido al Archena a lo largo de estas dos temporadas y que pese a la situación que atraviesa el equipo mantiene la misma ilusión que le provocó la llamada del ahora entrenador Kilian Moreno hace unos veranos. “Llegué a Archena tras una mala temporada en el Elche, de pocos minutos y muchas inseguridades, y tras una llamada de Kilian, director deportivo de Archena FC, confiando en mí para ocupar la portería y llenándome otra vez de ilusión”.
Esa ilusión también estuvo presente en el primer partido de liga frente al Lorca CFB (1-3). “No sabíamos cómo era la competición, ni cómo podía salir, lo único que teníamos claro era cómo íbamos a salir, las ganas de debutar en la categoría y de querer sumar la primera victoria” recuerda el guardameta.
El Archena tuvo un inicio de ensueño, llegó a liderar el subgrupo A, soñó con la Copa del Rey (que finalmente fue suspendida) y acabó logrando la permanencia al final de la primera fase. “La verdad es que todo el mundo se reía de nosotros. Al principio decían que era suerte, pero cuando partido tras partido seguíamos en la zona alta, nos ganamos el respeto de todos y demostramos ser unos de los equipos más fuertes”.
En la segunda fase, además de disfrutar de los partidos sin presión, “el objetivo siempre era ganar todo y poder darle más oportunidades a los que se lo merecían o habían contado con menos minutos”. En esa ronda, le llegó el turno a Joselu, que se estrenó bajo palos frente al Levante. “La verdad es que tuve muchos nervios antes de empezar, pero después lo disfruté como un crío chico. Ese partido fue muy importante para dar un gran paso hacia delante en mi carrera” reconoce.
Pero no hay dos temporadas iguales y el Archena está viviendo en la actual, la otra cara de la moneda. Ha pasado de codearse con los primeros puestos a no salir del descenso, “es duro ver como cada partido nos merecemos más de lo que pone en los resultados. En resumen, creo que esta temporada estamos teniendo muy mala suerte”.
El equipo ha cambiado de entrenador, de jugadores, pero los resultados siguen sin llegar. “Las temporadas son muy largas y ver como los resultados no acompañan hace que haya una mala dinámica en el equipo y al final si hay una mala dinámica, da igual los refuerzos o la calidad de los jugadores”. Una racha que Joselu está convencido todavía puede cambiar. “Nada nunca es imposible, y menos en este grupo, tenemos aún mucha ilusión y fútbol por dar y seguro que alegrías también”.
El Archena es el colista del grupo 7 de División de Honor. La permanencia se sitúa a 20 puntos, es decir, a más de la mitad de los puntos que quedan en juego (30). De ahí que nadie en el vestuario la dé todavía por perdida. “Mientras haya un 1% de posibilidades habrá un 99% de fe por parte del equipo para dejar al club y a la afición donde se merecen”.
Joselu Correas (2004) está contando con los minutos que no tuvo la temporada pasada desde la llegada de Kilian al banquillo, “cada minuto que juego en esta categoría me siento mucho más feliz y mucho mejor, estos dos años en División de Honor han sido los mejores. Me queda un año de juvenil y me encantaría seguir en la categoría, pero nunca le cierro las puertas a un mayor reto”.