El baile de entrenadores continúa en el Grupo 8 de Liga Nacional. El último en ser destituido ha sido Sergio Díaz (en la foto, el segundo por la derecha), que el pasado domingo dirigió en Elche el último partido del Don Bosco.
Los resultados han sido uno de los motivos que le han costado el puesto a Sergio Díaz al frente del CD Don Bosco. En la tarde-noche de ayer, el club le comunicaba la decisión al valenciano que tan solo ha durado diez jornadas al frente del equipo. Un periodo en el que ha acumulado seis derrotas, las últimas cinco de manera consecutiva, por tan solo un triunfo y tres empates que han llevado al conjunto salesiano a ser el colista del Grupo 8 de Liga Nacional.
El club ya se ha puesto manos a la obra para buscarle sustituto, mientras tanto se hará cargo del equipo José Almiñana, que hasta ayer ejercía de segundo entrenador del equipo.
Con el adiós de Sergio Díaz, ya son cuatro los cambios que se han producido en este inicio de temporada en el grupo
El primero fue Honorio Gómez que presentó su dimisión por motivos personales al frente del Club La Vall en la jornada 1, y a pesar de las dificultades con Iván Bueso el equipo se mantiene fuera de los puestos de descenso. Más tarde fue Sebastián Lora quien voluntariamente se marchó del Ciudad de Benidorm, dejando su sitio a Guillermo Santos Juanes, que la temporada pasada lideró al CD Dénia; precisamente el club de la Marina Alta destituyó hace unas jornadas a Manolo Guijarro, ahora es Javi Signes el que intenta redirigir el rumbo del equipo.