El Gimnástica de Ceuta visita este mediodía al Sevilla inmerso en aguas revueltas por la inestabilidad del club. El conjunto caballa buscará la primera victoria a domicilio con la que reconducir el rumbo en el grupo 4 de División de Honor.
Semana tras semana se suceden nuevos acontecimientos en el Gimnástica de Ceuta que no ayudan a aportar estabilidad al vestuario. La primera victoria del curso fue impugnada por el UD Dos Hermanas San Andrés por posible alineación indebida, una situación que todavía no ha quedado resuelta, pese a que el club mantiene que esta no se produjo. Posteriormente, el club cambiaba de propietario. Después de 25 años al frente, Mohamed Amar dimitía como presidente y dejaba la Gimnástica en manos del Polillas Ceuta que preside Jesús Quintero. Si esto fuera poco, este lunes el que presentaba su renuncia al cargo era el entrenador Rafa Salcedo que ya tiene sustituto. Juan Hernández se estrena esta mañana, 12:30 horas, en el campo nº 4 de la Ciudad Deportiva José Ramón Cisnero Palacios.
Esa inestabilidad también se refleja en los resultados y la irregularidad del equipo sobre el terreno de juego. En su feudo solo ha logado vencer en la primera jornada por 3 a 1 a UD Dos Hermanas San Andrés, mientras que perdió por la mínima ante el Córdoba CF (0-1) y la pasada semana, 0-3 ante el AD Nervión.
Sus dos salidas se han saldado con sonrojantes goleadas. El Real Betis le endosó un 14 a 0, mientras que el Granada ganó por 10 a 1. Hoy, el equipo confía en poder ofrecer una grata imagen ante el líder, el Sevilla FC que viene de caer por 2 a 0 en Cádiz.
La permanencia es el reto para una plantilla que ha cambiado radicalmente con respecto a la pasada temporada. La Gimnástica ha pasado de competir con un plantel compuesto por jugadores foráneos, cuerpo técnico incluido, que entrenaba en Santiponce (Sevilla) y únicamente viajaba a la ciudad autónoma para disputar sus encuentros como local en el ‘Pirri’, a hacerlo con un plantel completamente de chicos de Ceuta y sin ninguna experiencia en la categoría.