El Real Zaragoza como colectivo y el técnico Iván Martínez en el plano individual buscarán este mediodía (12 horas) en el estadio Abanca Balaídos disputar la segunda final de Copa de Campeones de su historia.
Para el conjunto blanquillo es la cuarta participación en el certamen que tiene como objetivo señalar al mejor equipo juvenil de España. De momento, únicamente en una logró llegar a la final, aunque no ganarla. Se estrenó en la temporada 1999-2000, pero no consiguió superar la fase de grupos; y regresó dos años después, en la que se quedó con la miel en los labios.
En la temporada 2001-2002 con un jovencísimo Iván Martínez en sus filas, actualmente técnico del División de Honor del Real Zaragoza, alcanzó la final que perdieron por 3 a 0 frente al Atlético de Madrid. Curiosamente el vigente campeón de la competición al que apearon los maños este lunes en cuartos.
La condición de invicto de los rojiblancos (era el único equipo de División de Honor que no había perdido ningún partido) fue todo un estímulo para los Jesús Jiménez y compañía en su afán por seguir cosechando éxitos. Hoy, frente al RC Celta, vuelven a verse las caras con uno de esos equipos que conjuga el verbo ganar como pocos. Los celestes solo saben sumar de tres en tres en este 2019. Acumulan 14 victorias consecutivas en liga, 15 si se añade la victoria frente al CD Tenerife en la primera eliminatoria de la Copa de Campeones.
Doce años ha tardado el Real Zaragoza en volver a ganar una liga y solo noventa minutos le separan de una final que vende un billete para la UEFA Youth League, un aliciente más por el que darlo todo esta mañana, en un escenario único como Balaídos.