El Real Zaragoza afronta, tras la histórica campaña anterior, una temporada ilusionante con la participación en la UEFA Youth League como principal reto, al tratarse de la primera ocasión en la que el equipo blanquillo disputa dicha competición.
Con el técnico Iván Martínez nuevamente al mando de la nave, tras su impactante debut en la categoría, la plantilla ha sufrido una reconstrucción casi total de manera obligada. Las bajas, por cuestión de edad, de quienes conformaban la columna vertebral del equipo que se alzó con la Copa de Campeones el pasado mes de mayo en Balaidos han sido numerosas, promocionando en su casi totalidad (Azón, Hernández, Otu, Martín, Castillo, Torres, Sancho, Benedet y Jiménez) al Deportivo Aragón, filial zaragocista; en realidad, sólo Nacho Alastuey, que ha emprendido la aventura americana, como estudiante y futbolista, en la Florida Atlantic University ha sido el único en no permanecer vinculado a la entidad blanquilla. De manera, eso sí, sorprendente se produjo la salida de Rodri Val, quien, en una operación casi simultánea a la llegada al primer equipo del ghanés Raphael Dwamena, firmaba por el Levante.
Pocas dudas hay sobre el importante peso que tendrán los pocos futbolistas que continúan en la plantilla y que ya tuvieron un papel destacado la temporada anterior: los defensas Francésy Borge (además del aún convaleciente de su rotura de ligamento cruzado anterior Escuín), el mediocentro Francho Serrano, llamado a ser el faro que guie a los blanquillos, y los atacantes Puche y Marvin, así como otros que tuvieron menos participación como el porteroAcín y el elegante Vela, que deben convertirse ya en protagonistas.
A todos ellos se unen las tres incorporaciones que se han producido desde fuera de la Ciudad Deportiva zaragocista: Marc Esteban procedente del Damm, Miguel Soler que llega desde el mallorquín Penya Arrabal y Antonio “Totti” Vera desde el Archena. Y, finalmente, se han incorporado a las órdenes de Iván Martínez un puñado de futbolistas criados en la propia cantera. De ellos, algunos ya con experiencia en División de Honor Juvenil, aunque en otros clubes de la ciudad (Jay, Jorge Ruiz, Diego Marín, Asier Seijo o Iván Azón, por ejemplo) junto a otros que llegan desde los equipos de Liga Nacional Juvenil o desde los equipos cadete; entre ellos podemos destacar al lateral zurdo David Mata, al polivalente y llegador Fabio Conte o al delantero Luis Carbonell, una de las perlas de la cantera blanquilla, sobre quien ya han puesto sus ojos otros clubes.
Aun así, a varias semanas de iniciarse la competición, Iván Martínez debe terminar de definir su plantilla de manera definitiva. Con casi toda seguridad algunos de los que a día de hoy todavía forman parte del grupo de trabajo acabarán saliendo cedidos a alguno de los otros clubes zaragozanos que militan este año en División de Honor Juvenil (Stadium Casablanca y C.D. Ebro). Queda por ver si el entrenador zaragozano junto a su cuerpo técnico vuelven a hacer surgir la “magia” de la temporada pasada y repiten los éxitos, ahora ya no sólo a nivel nacional sino europeo.