Ian Sánchez (2003, Dos Hermanas, Sevilla) será una de esas caras que podía estar y no estará en el inicio de la nueva temporada en la élite del fútbol juvenil. El que fuera uno de los jugadores de la histórica temporada del Castilleja CF ha cambiado la División de Honor por la liga universitaria de Estados Unidos. Un gran cambio que nos explica de primera mano.
PREGUNTA. Empecemos por el principio, ¿cómo y cuándo surge la oportunidad de marcharte a Estados Unidos?
RESPUESTA. En mi caso, el verano pasado (2020) contactó directamente conmigo, a través de las redes sociales (Instagram), una de las empresas intermediarias que se encargan de poner en contacto a los deportistas de aquí con los entrenadores de allí, y también de organizarte los requisitos, el papeleo… Tras este primer contacto e informarnos bien del tema, barajamos otras empresas como opción, eligiendo finalmente la que más se ajustaba a nuestras necesidades (@WLEgroup).
Quiero destacar que no es necesario esperar un primer contacto o mensaje de ellos, puede ser uno mismo quien hable con ellas y se informe. También es importante saber que es un proceso largo desde el “sí quiero irme” hasta que te montas en el avión, mucho papeleo, médicos, exámenes, conversaciones…
P. Quedándote un año de juvenil, después del temporadón que hicisteis con el Castilleja en el grupo 4 de División de Honor, ¿qué motivos te impulsan a cambiar de aires?
R. El principal factor que me hace seguir adelante es la facilidad de poder compaginar los estudios con el deporte de alto nivel, ya que está todo orientado hacia ello. También el empezar cuanto antes a poder integrarme en un país y unas ligas nuevas, a que me empiecen a conocer cuanto antes.
Es cierto que es una decisión difícil, ya que en vez de jugar en División de Honor y en un club donde ya me conocen, voy a pertenecer a un equipo donde el idioma es diferente y vuelvo a ser de nuevo el jugador más joven y novato, pues aquí pueden intervenir jugadores de entre 18 y 23 años.
P. Desde el verano de 2020 hasta que te subes al avión que te lleva al otro lado del charco, ¿has llevado a cabo alguna preparación especial tanto de estudios como deportiva?
R. No, no he realizado una preparación específica, simplemente trabajar diariamente para sacar mi máximo rendimiento tanto en los estudios como en el fútbol, siendo más cómodo en el Castilleja CF donde he podido aprender, disfrutar y prepararme correctamente, por lo que llego satisfecho con mi trabajo y con la tranquilidad de haber hecho las cosas bien.
Si es cierto que desde el primer momento he tenido que trabajar mucho el inglés, ya que necesitaba mejorar mi nivel para conversar con los entrenadores en las llamadas, poder relacionarme con mis compañeros y tener un día a día fluido.
P. Aunque supongo que variará dependiendo de la universidad, ¿cuáles son los requisitos comunes para estudiar en EEUU?
R. Los requisitos son los siguientes:
Un video de fútbol (highlights) que demuestre de lo que eres capaz tanto ofensiva como defensivamente. Esto es lo que los entrenadores de EEUU van a ver primero de ti y a valorar. Si consigues gustarles, se ponen en contacto contigo y tu asesor del proyecto y valoran la beca a darte a través de los siguientes dos factores: las medias de tus notas de los últimos 4 años (a partir del 8’5 te consideran un estudiante excelente) y tu nivel de inglés valorado en un examen. Dependiendo de la Universidad aceptan diferentes exámenes. En general valen TOEFL y Duolingo.
A través de estos tres factores y de lo que está dispuesto a pagar la familia del deportista, acordado previamente con el asesor, la Universidad te manda una propuesta de beca que será negociada por el asesor del proyecto. También cabe destacar que cuanto más prestigiosa es la liga en la que juegues en España, más exposición ante los entrenadores vas a tener.
Con todo esto quiero decir que cualquiera puede optar a esta oportunidad, solo que según varíen estos factores en cada uno, la beca será mayor o menor (puede llegar al 100%).
P. O sea que, aunque desde fuera parece que este tipo de becas deportivas o estudiar-jugar en un país como EEUU no es apto para todos los bolsillos, tu experiencia tumba esa percepción.
R. Como dije antes, según varíen los factores necesarios para la beca en cada deportista también variará el precio de todo. El primer añoo es un poco más caro, pero una vez que ya tienes un buen nivel de inglés, tus estadísticas de los partidos junto a tus datos estadounidenses, y tus notas de la uni, los siguientes años la beca va mejorando por lo que tus gastos disminuyen. Otra opción para ahorrar es trabajar en la Universidad.
Pero por lo general, es cierto que hay muchos gastos como el viaje o tener una vida cómoda allí, tener las necesidades y la organización de tu vida a tu gusto no es gratis (electrodomésticos, ropa, gastos esenciales, posesiones…). Pese a todo, creo que es apto para todos los bolsillos ya que existen muchas universidades y seguro que alguna se ajusta a las necesidades de cada uno.
P. ¿En qué Universidad y qué va a estudiar Ian Sánchez?
R. Estudio en Campbellsville University, pero no tengo claro la carrera concreta que quiero estudiar por eso me dieron la opción de indeciso, es decir, el primer semestre estudiaré asignaturas generales que me gusten y me orienten hacia algo más específico. Ahora mismo doy asignatura de empresariales, economía, pero también química que es la que más me gusta. Luego también tengo asignaturas obligatorias como programación, orientación para estudiantes de primer año y una de inglés que en mi caso es “writing skills” relacionado con las habilidades de escribir y analizar textos.
P. ¿Cómo está siendo tu experiencia los primeros días?
R. Mis primeros días han sido como me lo esperaba, con entrenamientos exigentes para ver el nivel de los jugadores. Son los más físicos que he hecho en mi vida. Además, y esto es lo que me ha chocado un poco, es que somos casi 100 jugadores divididos en tres equipos. La intensidad, la dedicación y la exigencia de cada entreno son máximas ya que la gran mayoría de jugadores somos internacionales que lo que buscamos es darnos a conocer en Norteamérica.
También me ha sorprendido la figura del entrenador, aquí es como el jefe de todos, alguien con el que tienes que hablar cuanto menos mejor, solo trabajar, mientras que en España existe más relación.
Lo más llamativo es el gran nivel de seriedad y profesionalidad que se nos ofrece fuera del terreno de juego, con reuniones, fisios, gimnasios, alimentación… Las instalaciones son una pasada, y cada día que piso el campo y los vestuarios me sorprenden más, realmente te hacen sentir como un profesional.
P. ¿Qué diferencias has notado entre la liga universitaria y la División de Honor?
R. Hay un gran nivel, diría que incluso mejor que gran parte de División de Honor, pero no es una comparación muy válida ya que aquí todos los jugadores importantes son mayores, me sacan hasta 5 años y eso se nota a la hora de estar enfocado en los ejercicios y la intensidad.
Por otro lado, el juego es muy distinto, mucho más vertical y donde hay que estar todo el rato corriendo, no hay pausa, nuestro campo es grandísimo, mientras que yo estaba acostumbrado a un juego más de toque y de buscar los espacios, algo más táctico con movimientos ensayados y donde cada uno sabíamos nuestro rol y lo que necesitábamos hacer en cada momento; aquí se trata de llegar cuanto antes a la portería, al menos en el principio de mi temporada.
P. ¿Qué tal con tus nuevos compañeros?
R. El ambiente en el vestuario es buenísimo, ya que pasamos gran parte del día juntos, aunque somos muchos hispanohablantes lo que provoca que mi nivel de inglés no mejore (risas). En el día a día e incluso en las clases notas que todo está enfocado a los atletas, es lo más importante, te dan todas las facilidades y ayudas. Diariamente tenemos una rutina que para mí estos primeros días en un poco estresante ya que le tengo que dedicar más tiempo a los estudios debido al idioma y entrenamos mucho, pero es muy sana porque estás haciendo siempre lo que te gusta y con tus amigos, y sabes que todo es para tu mejoría. Dos días a la semana solo tengo dos clases, y los otros tres con tres clases.
P. Con todo lo que me cuentas, ¿crees que llegas preparado deportivamente para la liga universitaria tras un añoo excepcional con el Castilleja en el grupo 4 de División de Honor?
R. Sí, estoy muy contento por la preparación en el Castilleja, he aprendido muchísimo tácticamente, a leer el juego en diferentes sistemas y a controlar cada situación. He conseguido llegar a mi mejor nivel físico y técnico hasta ahora, es decir una gran ayuda en mi evolución como futbolista, gracias al magnifico cuerpo técnico que siempre ha estado detrás de nosotros para que consigamos nuestras metas.
P. Una vez se confirmó tu marcha del equipo, ¿te dio tiempo a despedirte del club y compañeros?
R. Todos sabíamos que al acabar la temporada cada uno tomaríamos caminos distintos y a pesar de que quedo pendiente nuestra reunión de despedida, las últimas semanas al haber conseguido ya nuestro objetivo sirvió para hacer más piña como equipo y amigos, y para disfrutar de la magnífica temporada. Gracias a esto me llevo grandes amigos y una buenísima relación con el club y el cuerpo técnico al que se lo debo todo, resaltando al director deportivo Juanjo Gonzales quien me ha ayudado desde el principio a conseguir esta experiencia.
P. Hablas del Castilleja como si llevaras toda la vida en él, pero realmente solo jugaste la pasada temporada. ¿Cuáles fueron tus equipos anteriores?
R. Mi trayectoria se compone de etapas muy distintas ya que he jugado en varios equipos. Empecé a jugar y competir en un equipo a los 9 años en fútbol 7, en el equipo de mi pueblo (Dos Hermanas), por pura diversión. Cada año fue mejorando mi situación, llegando a ser máximo goleador y quedando terceros en la liga. Por lo que mi etapa de fútbol 7 acabó haciendo que amara este deporte y provocando que decidiera tomármelo muy enserio para mejorar cada día. La ambición desde entonces no ha parado de crecer en cada entrenamiento.
Me pasaba los días enteros jugando en las pistas de futsal de mi barrio sin ninguna obligación. Después jugué un año en el Montequinto donde me adapté al fútbol 11 y seguidamente decidí jugar con mis amigos de la infancia en La Motilla. En cadete de primer año comencé en el Centro Histórico, pero acabé la temporada en Los Caminantes. Para finalizar la etapa cadete fiché por el Dos Hermanas, logrando participar en el juvenil de Tercera y el de Preferente. La siguiente temporada pasé al equipo de Juvenil Preferente y a formar parte del equipo sénior de Primera Andaluza siendo juvenil de primer año; fue la temporada donde mejoré como persona tanto dentro como fuera del campo, gracias a los magníficos entrenadores y a todos los compañeros que me impulsaron a mejorar.
En el verano de 2020 fue cuando di el salto y todo el trabajo dio su resultado. Empezamos con el proceso de la beca de Estados Unidos y fiché por el Castilleja CF de División de Honor realizando la mejor temporada de la historia de ese equipo y disfrutando de la exigencia de la categoría. Ahora estoy en Campbellsville University en el equipo de futbol (soccer) en el centro de Kentucky compitiendo en la liga NAIA universitaria. Nos llamamos los “Tigers”.
P. A pesar de la lejanía, ¿vas a estar pendiente y a seguir la liga la evolución de tu Castilleja CF?
R. Voy a seguir con un contacto cercano con mi equipo, conozco a muchos de los nuevos jugadores y les voy a seguir partido a partido y apoyándoles en todo lo que pueda. también me gustaría seguir conociendo la situación de mis rivales y de los equipos a los que me he enfrentado y conocido este año, en resumen, ser un fan más de la liga más bonita de juveniles.
P. Sin duda, en eso último estamos de acuerdo. Por acabar, ¿qué fue lo primero que metió Ian en la maleta y lo que no podía olvidar en España?
R. Lo primero que metí en la maleta fue la bandera de España que la tengo colgada en la pared y algo esencial que no podía faltar eran mis botas de fútbol de confianza.