El Atlético Sanluqueño ha vivido la cara y la cruz la temporada de su debut en División de Honor. Tras un inmejorable arranque, el equipo encadenó ocho derrotas consecutivas. Hace unos días rompió esa mala racha y hoy, su capitán Álvaro Rosado confía en poder prolongar esa buena línea frente al Córdoba.
PREGUNTA. ¡Cuántos habrían firmado el debut que en División de Honor que tuvo el Atlético Sanluqueño!
RESPUESTA. Hicimos un arranque de temporada increíble porque sabíamos la liga que íbamos a afrontar, aunque por la Covid-19 no se pudo formar quizá el equipo que se esperaba. Así y todo, con lo que había en el club y con lo que llegaba de categorías inferiores se formó el bloque que poco a poco, a base de trabajo se fue perfeccionado y llegaron esos resultados que nos dieron mucha alegría e ilusión.
P. Los datos dan más valor a lo conseguido: 14 puntos en las 7 primeras jornadas, en un grupo donde están primeras espadas como Sevilla, Betis o Cádiz. ¡Es que menudo grupo!
R. Sabíamos que era una liga dura, difícil, fuerte… donde nos íbamos a encontrar jugadores muy buenos, pero también es una categoría muy bonita e ilusionante y también teníamos que buscar nuestras armas para intentar contrarrestar a los demás equipos y pensar siempre que nada es imposible.
P. De 7 jornadas brillantes a 8 derrotas seguidas. El contraste es bestial. ¿Qué factores influyen para que se dé esta situación?
R. De empezar la liga tan bien, con resultados tan positivos, y de pronto entrar en una racha tan negativa, no sabría decirte que factores influyeron para que se diera. Pero cuando se dan los resultados negativos, la forma de trabajar no es la misma que cuando se están consiguiendo los positivos. Antes de empezar la temporada sabíamos que esta situación se podía dar en cualquier momento y estábamos preparados para ello. Seguimos trabajando con la misma ilusión y con la confianza de darle la vuelta a las cosas.
P. La parte positiva de esta mala racha es que, salvo las derrotas contra Sevilla, Recre y Castilleja, los resultados fueron muy ajustados. Es decir, el trabajo estaba siendo bueno.
R. Sí, trabajamos bien, era cosa de una mala racha, mala suerte. Había que trabajar más todavía para volver a la senda de los puntos lo antes posible.
P. ¿El 6 a 1 contra el Castilleja es el punto de reflexión-reacción que necesitaba el equipo?
R. Obviamente ese resultado fue un golpe durísimo, sobre todo por la imagen que dimos que desde mi punto de vista fue vergonzosa. Quizá fue un ultimátum en el que teníamos que espabilar, que si queríamos hacer historia teníamos que levantar esto como fuera y el partido contra el Nervión era la oportunidad de reivindicarnos, de decir que no estábamos muertos, que todavía estábamos con vida y que nos queda por pelear para mantener la categoría, que confiamos que así será.
P. Durante estos meses que no conseguíais puntuar, ¿cuál era el mensaje que se transmitía en el vestuario?
R. El mensaje era que no estaba todo hecho, que nos íbamos a recuperar de la racha y que las cosas iban a salir, y por supuesto, que íbamos a mantener la categoría que es el objetivo desde principio. Y estamos convencidos y seguimos convencidos a día de hoy de que lo vamos a conseguir.
P. ¿La victoria contra el Nervión suponen algo más que tres puntos?
R. Era algo que necesitábamos y merecíamos y sobre todo también había ya que cambiar las sensaciones en el vestuario y los entrenamientos. Cuando las cosas salen bien se está mucho más a gusto.
P. La semana, más allá del trabajo, ¿cómo ha sido después de ese triunfo?
R. Fue como quitarse un peso de encima, liberarte de algo que llevas mucho tiempo esperando. Después de la victoria se transmitió en el vestuario mucha alegría y sobre todo tenemos en mente, que tal y como hemos salido de esta mala racha no podemos volver a entrar en estos últimos cuatro últimos partidos, tenemos que salir a por todas y conseguir los máximos puntos posible.
P. Recta final de la Primera Fase, ¿con qué objetivo la afronta el Atlético Sanluqueño?
R. La afrontamos con los mismos objetivos que nos pusimos al principio de temporada, con muchísimas ganas, con los pensamientos de salir al campo a darlo todo y mantener la categoría para hacer historia con el club.