Adam Boayar Benaisa es el último talento precoz surgido de la prolífera cantera del CF Rusadir. Debutó este sábado en División de Honor con un gol de chilena que ha dado la vuelta al mundo. El centrocampista, que acaba de cumplir los 15 años, no es la primera vez que crea una obra de arte como la del empate frente al UD Dos Hermanas San Andrés.
El CF Rusadir regresa esta temporada a División de Honor con una de las plantillas más jóvenes que se recuerdan en el pasado más reciente. El club además de apostar por jugadores con experiencia, este año se inclina por jóvenes con ganas de sobresalir. A sus 15 años, Nordin Al-al ha sido titular en los cuatro partidos disputados por los melillenses, con la misma edad y con las mismas ganas de quemar etapas a una velocidad endiablada debutaron este sábado Amir y Adam: los dos fabricaron el gol que permitió al Juvenil A sumar un punto frente al UD Dos Hermanas San Andrés.
La acción tenía que salir bien, aunque apenas les había dado tiempo de perfeccionarla. “La verdad es que la hicimos solamente una vez en el entrenamiento, y en el partido, la jugada que marcó era al primer palo, pero el rival se la sabía así que le pedí que me la mandara al segundo. Cuando vi el balón volar a la medida perfecta no me lo pensé dos veces, confié en mí y la cambié de palo con un remate de chilena” relata el goleador más joven de esta temporada en la máxima categoría juvenil.
Una chilena que asegura no sorprenderle ya que lleva “mucho tiempo entrenando esa finalización”. La ha pulido no solo sobre el tapete verde, sino también gracias al fútbol playa, modalidad que práctica durante el verano y que le ha valido para participar en numerosos torneos y Campeonatos de España tanto con el Rusadir como con la selección de Melilla.
La liga cadete no arrancará en la Ciudad Autónoma hasta el mes de enero, lo que supone una oportunidad de oro para que jugadores de la talla de Adam pueda seguir desarrollándose en la élite juvenil. “Solamente con el trabajo que hacemos en los entrenamientos, los más jóvenes estamos creciendo deportivamente. Si en las próximas jornadas tengo opciones de seguir sumando minutos, mi intención es no bajar mi rendimiento y así seguir progresando. A corto plazo, mis retos son trabajar duro y dar lo mejor de mí esta temporada para que el equipo quede lo más alto posible” reconoce el centrocampista que lleva desde Benjamín de segundo año en el Rusadir y con el que acaba de llegar a la élite formativa.
“El debut supuso una gran alegría. Estoy satisfecho con mi trabajo, ya que además del gol trabajé en defensa con el equipo. Al final del partido recibí muchas felicitaciones, la primera la del entrenador, Carlos Villalobos. Considero importantes sus palabras y también que confíe en gente joven como nosotros. Ahora hay que seguir dándolo todo para demostrarle que no se ha equivocado al darnos la oportunidad”.