El CD Ebro se ha visto obligado a presentar una actualización de su ‘particular’ Diccionario después de ganar este miércoles por 0 a 1 al Cerdanyola del Vallés. Esta victoria ha supuesto la entrada al repertorio de la palabra ‘líder’, ya que tras 119 partidos en División de Honor, el Juvenil A lidera la clasificación por primera vez en su historia.
“Quizá estamos un escalón por debajo de clubes como el Real Zaragoza, Nástic o Sabadell, pero la ilusión de los jugadores, la gran mayoría de ellos sin experiencia en una categoría nacional, nos ha llevado hasta la primera plaza del Subgrupo B del grupo 3 de División de Honor” explica el segundo entrenador y coordinador de fútbol 11 del club, Óscar Puig.
El actual proyecto mantiene únicamente a cuatro jugadores de la anterior temporada. Solo un futbolista ha promocionado desde el Juvenil B que subió en bloque a Liga Nacional, mientras que el resto se han incorporado de categorías como Primera o Segunda juvenil de Aragón, o en el caso de Mohamed Mballo del UE Breda de Primera Juvenil Catalana. Sin duda, una apuesta arriesgada, pero un factor que le da aún más valor a lo logrado por el Ebro en este inicio de temporada.
El equipo zaragozano se ponía al día este miércoles tras haberse aplazado el compromiso de la primera jornada en casa del debutante Cerdanyola del Vallés. Viajaba siendo consciente de que ganar le otorgaba el primer puesto. “Eso nos dio alas para encarar el partido. Además, se trata de un rival de nuestra liga, de esos a los que hay que ganar para poder disfrutar en el futuro”.
Por el momento, Óscar se muestra optimista. “Estamos en un subgrupo con equipos muy parejos al nuestro. Por eso debemos aprovechar este gran momento y sumar todos los puntos posibles. La experiencia nos advierte de que cualquier rival te puede ganar, somos sabedores de ello y así lo hemos transmitido a los jugadores. Una plantilla sin egos, donde el compañerismo y la humildad rezuman por los cuatro costados. Esos valores nos permitirán llegar donde queramos”.
270 minutos sin encajar ningún gol
Por ahora han llegado a lo más alto, al liderato, con tres victorias consecutivas y 270 minutos sin encajar ningún gol. Además, y como dato curioso, el Ebro ha conseguido ya más victorias a domicilio que durante las 25 jornadas del curso pasado.