Castellón y Rukh llegaron a la última jornada del grupo A con perspectivas muy diferentes. Los valencianos contaban sus partidos anteriores por derrotas y no se jugaban nada. Los ucranianos habían vencido sus dos primeros envites por la mínima y solamente necesitaban un empate para abrazar las semifinales. Al final, victoria ucraniana y pase a las semifinales, que se disputarán hoy domingo.
La primera jugada de mérito del partido fue una cabalgada del ucraniano Shostak, cuyo centro salió desviado. Minutos después, el 8 amarillo –Stoliarchuk- pidió un penalti por un derribo que el árbitro no apreció. Junto a su compañero Bendera (9) fueron los dos jugadores de mayor ritmo y nervio de la primera mitad. El Castellón tocaba y tocaba cuando sus pelotero disponían del balón, pero sus triangulaciones apenas inquietaban al meta rival. Los pupilos de Ponomarov, por su parte, percutían una y otra vez desde las bandas. Y en este caso el resultado final era diferente: sus jugadas sí llevaban peligro. Hablamos de un equipo que mantiene un ritmo similar a un martilló pilón –o un tractor- durante todo el partido. Que tiene claro su plan. Y no parece que sea fácil ganarles.
Corría el minuto 29 cuando Bendera se sacó un caño ante un defensa rival y la jugada basculó entre las dos bandas amarillas. Sin embargo, el disparo final del 8 ucraniano se fue desviado. Una y otra vez los centros desde las bandas hacia el área castellonense se quedaban en intentos. Hasta que en el 36’ –al filo del descanso- Kholod no logró conectar un pase largo medido tras una falta lateral, en lo que era la jugada más clara desde el inicio del encuentro. Aún quedaba una parte, aún quedaba mucho por contar.
Y llegaron los goles
Al inicio de la segunda mitad, los cambios revitalizaron al Castellón. Ortega, con el 10 en la espalda, protagonizó las mejores jugadas. La batuta era de los orelluts, pero los goles no llegaban a pesar de hacerse con la posesión. En el 49 Kwasnytsia se marcaba una jugada de mérito, pero su tiro se quedaba en la orilla. Eran compases donde las posesiones largas de los blanquinegros y las salidas rápidas de los ucranianos se alternaban, pero no llegaban los remates. En el 63 Kholod no lograba conectar un centro cuando lo tenía todo hecho y poco a poco el Rukh se hacía con el partido. Su físico acababa mandando conforme pasaban los minutos.
El marcador se movió, al final, doce minutos más tarde. Kwasnytsia lograba acertar a bocajarro tras el enésimo centro al área. Y tres minutos más tarde llegaba el segundo tanto centroeuropeo. Varfolomieiev robaba un balón, combinaba con varios compañeros y al final lograba rubricar un centro lateral. El 21 castellonense –Ripolles- intentaba contestar tras un ataque rápido, pero el luminoso se quedaba en el 0-2. La hinchada ucraniana destacaba en la grada por sus cánticos. El partido estaba finiquitado. Su equipo ha hecho pleno y aspira a todo.
Ficha técnica
CD Castelló: 25. Hugo Ortega, 2. Alex Pons (14. Samuel Estrada, 8’), 3. José Albert (4.Luca Martin, 41’), 6. Víctor Ferrando, 7. Adam Hafidh (19.Andrés Fernández, 48’), 8. Adrián Gozalbo (10. Alejando Ortega, 41’), 9. Álvaro Moros (11.Álvaro Heredia, 60’), 12. Miquel Arin, 15. Vicente Marco (18. César Ramos, 48’), 17. José Ángel Ruiz, 21. Alejandro Ripollés.
Entrenador: José Manuel Sanahuja
Rukh FC: 13. Vadin Solohub, 3.Bohdan Sliubyk (14. Illia Kwasnytsia, 60’), 4.Vitalii Kholod, 5. Roman Dobrianskyi, 8. Andrii Stoliarchuk (2. Hlib Savchuk, 48’), 9. Ivan Bendera (10. Oleh Fedor, 41’), 11. Dmytro Shostak (19.Yevhenii Pastukh, 41’), 12. Ivan Dubovyi, 15. Denys Pidhurskyi (7. Ruslan Nepeipiiev, 48’), 18. Nikita Rohachov (17. Marko Sapuha, 60’), 18. Yuri Vazhynskyi (6. Ivan Varfolomieive, 48’)
Entrenador: Vitalli Ponomarov
Goles: 0-1. M. 75: Kwasnytsia; 0-2. M.78: Varfolomieiev
Árbitro: Velez Echavarria, Eric Santiago. Sin amonestaciones.
Texto: José L. Llagües.