El CF La Nucía defenderá esta tarde, por primera vez en su historia, el liderato en Liga Nacional. El conjunto de Rubén Braco ha dejado de ser un simple debutante en la categoría para convertirse en un serio aspirante al ascenso a División de Honor. Lo es también el San José, su rival de esta jornada, ante al que espera seguir argumentando el por qué es el equipo revelación de este curso en el grupo 8.
PREGUNTA. ¿Se puede pensar en otros objetivos mayores al de la permanencia?
RESPUESTA. Aunque suene a tópico, nosotros vamos semana a semana. Eso nos ha llevado a estar donde estamos y continuaremos así. Contra el San José lo único que pensamos es en lograr los tres puntos.
P. Pero coincidimos en que habéis dejado de ser un simple debutante.
R. En este momento podemos ser candidatos a la División de Honor, ya que le sacamos siete puntos al San Marcelino que sería el otro no filial a banda del San José. Creo que para aspirar a algo más, un aspecto muy importante es tratar de reforzarnos con jugadores que están en División de Honor y no están contando con muchos minutos o no se sienten importantes en sus equipos, pero no está siendo fácil. La situación de pandemia no ayuda.
P. ¿Cuál es la fórmula de un equipo al que proyectan de categoría a tres semanas de arrancar la liga?
R. El año pasado teníamos una plantilla muy joven y han continuado 12 jugadores. En el momento que nos confirman que estamos en Liga Nacional, nosotros realizamos 3 incorporaciones, más las que ya habíamos hecho; eso unido a la base del equipo que ya entendían mi filosofía y estilo de juego lo ha hecho todo más fácil.
¿La categoría ha exigido un cambio de planificación de lo que tenías previsto para el equipo este año?
No, los rivales tienen más nivel, son más exigentes, pero trabajamos igual. Analizamos el rival entre domingo y lunes y enfocamos la segunda mitad de la semana a entrenar de cara al rival que nos toca ese fin de semana.
P. Dos años de éxito en el CF La Nucía. ¿Es el entrenador o son los jugadores?
R. Es una mezcla. Es muy importante la mentalidad que lleve el entrenador, pero también los jugadores te deben escuchar y el entrenador se debe hacer escuchar. Saber dónde estás, saber el contexto en el que te mueves, el tipo de jugador que tienes, cambiar el estilo de juego en función de lo que tienes, adaptarte a ellos y viceversa. Ahí también entran que vayan saliendo los resultados, si estos no salen, los jugadores es posible que dejen de confiar en ti.
P. ¿Cómo es la mentalidad del vestuario?
R. La mentalidad es muy ganadora, la definición sería la de ser muy sacrificados en el esfuerzo. Es un equipo muy físico y sabemos que para ganar cada partido, tenemos que correr mucho, correr más que el rival, ser muy sacrificados y estar más fuertes que ellos. Es lo que hacemos en cada partido y por ahora nos está yendo muy bien.
P. El año pasado tuviste a Rubén Sáiz y este curso a la nueva joya de la cantera de La Nucía, Jaume Galiana. ¿Hasta que punto es importante contar con jugadores de este nivel en el vestuario?
R. Es muy importante que el resto de compañeros vean en ellos un espejo donde mirarse, que esa posibilidad está ahí y que uno debe trabajar para un día poder formar parte de equipo así. La verdad que para Rubén y para Jaume no es fácil. Se mueven diariamente en un contexto diferente. El primer equipo que tiene mucho balón y juega en un campo muy grande como el estadio Camilo Cano. Nosotros no somos un equipo que abusa de tener balón y además jugamos en un campo de artificial que no es grande. Para ellos no es fácil, pero se han adaptado de maravilla. A nivel personal, nos aporta que tienes al mago que en cualquier momento te puede solucionar un partido.
P. Cumples tu segunda temporada en La Nucía. ¿Qué te ha aportado en tan poco tiempo como entrenador?
R. El año pasado sobre todo conocer otra zona de Preferente Juvenil que ya la conocía, aunque fuera otra zona, es similar. Por eso los resultados salieron y finalmente logramos subir a Liga Nacional. Una categoría que me hacía ilusión porque era la única categoría de fútbol juvenil que no había entrenado y eso es un aliciente.
La Nucía es club muy profesional, aprendo mucho como entrenador, fijándome mucho en los entrenadores que están por encima de mí: Juan Carlos (filial) y César Ferrando. También al hablar con los coordinadores Vicente, Kiko Chufa, director deportivo Kiko Lacasa… Aprender de gente que tiene tanto fútbol a sus espaldas es muy importante para un entrenador que se está formando.