El conjunto de Carlos Muñoz es noveno con 10 puntos tras haber sumado dos victorias en las ocho primeras jornadas de Liga.
Hasta 21 fichajes llevó a cabo el conjunto bermellón en verano, nueve de los cuales llegaron procedentes del CD San Francisco, club filial de la entidad mallorquinista. Con tal revolución en la plantilla, parece que el equipo de Carlos Muñoz todavía no ha encontrado las piezas necesarias para hacer funcionar al juvenil del Mallorca que compite en el grupo 3 de División de Honor. Muñoz ya era el entrenador del equipo la temporada pasada. Llegó en sustitución de Santi Miralles, y ya entonces terminó la Liga en quinta posición con 49 puntos, a 16 de la tercera plaza.
En la temporada actual, el Mallorca ha logrado dos victorias en ocho jornadas. Una a domicilio: 1-3 al Europa; y otra como local: 5-1 ante el Jàbac i Terrassa. Unos números alarmantes para un equipo acostumbrado a ocupar la zona noble de la tabla. La crisis es visible en un equipo que viene de perder 3-1 en Cornellà y empatar a cero ante el Girona, unas cifras que sitúan al conjunto bermellón en novena posición con 10 puntos, a 14 del líder, el Real Zaragoza. A esta altura de la temporada pasada los números tampoco eran mucho mejores que los actuales: 14 puntos en ocho jornadas. Pero entonces el juvenil bermellón era cuarto y tenía al líder a cinco puntos.
Las piezas clave
Pese a los resultados del equipo, Carlos Muñoz ha dado a un grupo selecto de jugadores, que han disputado la mayoría de los minutos en la presente temporada. En defensa, Ismael Estévez y Carles Sánchez han jugado todos los partidos partiendo como titulares. Y un fichaje llegado del FC Barcelona, Iván Bravo, ha sido de la partida en seis partidos. En el centro de campo, Miquel Alorda, en el San Francisco la temporada pasada, ha afrontado también todos los duelos como titular, y Elías Chentouf, también procedente del San Fran, es el máximo goleador del equipo con cuatro tantos en los siete partidos que ha disputado hasta la fecha. Del Numancia llegó Javier Albín, autor de dos goles, no ha faltado a ningún choque; Pablo Gálvez, uno de los supervivientes de la plantilla, ha anotado tres goles en las ocho jornadas que se llevan completadas; otro delantero, Iván Zamorano, llegado del San Francisco esta temporada, ha disputado las ocho jornadas de Liga y ha sido el autor de dos goles.
Momento para reaccionar
Tras la revolución que sufrió la plantilla en verano, parece claro que el grupo necesita aún un tiempo para madurar y compenetrarse de mejor manera. El grupo es joven, algunos de los jugadores se conocen del San Francisco, y seguro mejorarán su juego y sus resultados a medida que pasen las semanas. El Mallorca necesita una reacción. Y la mejor medicina es ganar. Su próximo partido, el viernes ante el Atlético Villacarlos.